“Me maltrata, pero es bueno con mis hijos”
¿Soportar los celos y maltratos de tu pareja sólo para que tus hijos no se queden sin padre? Esa es la pregunta que lanza Alicia a la consejera Michela Guarente.
Pregunta:
“Tengo 22 años y mi pareja tiene 41. Nos conocimos hace 5 años y tenemos 2 hijos. Desde que comenzamos dejé de tratar a algunas de mis amistades masculinas para no tener problemas con él. Pero él, por su parte, nunca ha dejado de tratar a sus amistades femeninas, sobre todo a sus ex novias. Cada vez que le he preguntado por esas mujeres él se enoja mucho. Tanto, que ha llegado a golpearme pero, claro, no con exageración. En realidad, él es un hombre responsable. Es bueno con los niños, con la casa, con todo.
Hay otro gran detalle que es el licor. Cuando tiene tiempo libre se lo dedica a sus amistades y no le gusta salir conmigo porque soy celosa. Tampoco sale con los niños y no le gusta que yo visite a mi mamá. Pero ya no soporto más a este hombre. A veces he pensado seriamente dejarlo, pero no he podido por mis bebés, porque están pequeños. y además me daría mucha pena regresar a casa de mi mamá con ellos. ¿Qué me aconsejan?”
Respuesta:
Gracias, Alicia, por contar tu situación y confiar en nosotros. Es muy lamentable lo que estás pasando, pues describe una situación de violencia de género.
Entiendo que quieres lo mejor para tus bebés y que quizás no quieras pedir ayuda a tu familia, pero es importante que busques ayuda, de preferencia profesional. Estas personas te pueden orientar para tomar decisiones, tanto desde el punto de vista legal, para resguardar tu salud física y emocional, como desde el punto de vista terapéutico, para que puedas desahogarte y comenzar a organizar tus pensamientos.
Es difícil pero, intenta ser objetiva
Ten en cuenta que la persona que ejerce violencia actúa en escalada. Conductas que al principio parecen inofensivas, a medida que pasa el tiempo pueden agravarse e ir en aumento. Como consecuencia, anula a su víctima (en este caso, tú) o limita la posibilidad de que ésta converse con otras personas (por lo que cuentas, a tu pareja no le gusta que te diviertas o visites familiares y amigos).
Recuerda que la violencia que ésta persona ejerce -con insultos, gritos o violencia física y sexual- es su responsabilidad. Tu NO eres culpable de su conducta. De ahí la importancia de que busques lo más pronto ayuda para que tomes decisiones claras y definitivas sobre cómo quieres vivir. Piensa sobre todo en tu salud y la de tus bebés.
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