¿Activismo en la salud sexual?
Lo sé: a veces te pones triste al ver las noticias, al revisar las redes sociales y darte cuenta de que hay muchas cosas que pasan en el mundo, que hacen los seres humanos, que no comprendes. ¿Pero habrá algo que podamos hacer? La Dra. Verótika nos tiene una propuesta
Fuente | Verónica Maza Bustamante (La doctora Verótika) periodista, educadora sexual, escritora, conferencista, promotora de los DDHH, melómana, exploradora de temas tabú
Por ejemplo, a veces no entiendes el por qué de la violencia hacia las mujeres, de la “lógica” en torno a lo que “hace hombre” a alguien del sexo masculino, las razones del acoso, del crimen… ¡de tantas cosas que te parecen horribles! Entonces te preguntas: ¿Qué puedo hacer yo —simple mortal, como se decía hace décadas— para aportar algo a mi familia, mi sociedad, mi país, al mundo que contrarreste todos esos actos negativos? Pareciera que no hay opción, pero sí existe. ¡Y puede ser, además de todo, muy divertida!
Entender tu causa
Navegando en la red me encontré un artículo en el portal Ecoosfera que me parece muy útil para explicar de qué manera puedes llevar el activismo a tu vida.
Primero tienes que entender que act significa acción, actividad, movimiento; y eso busca el activismo: mover a las personas desde una creencia hacia otra. Para lograrlo, necesitas ser “militante”, es decir, tienes que creer en una idea y luchar por ella.
Por ejemplo, si crees que la violencia hacia las mujeres no es correcta y se pueden cambiar esas ideas que nos han inculcado desde hace siglos sobre lo que una mujer puede o no puede hacer, debe o no decir, sobre su capacidad laboral, amorosa, económica, intelectual, entonces puedes ser militante de la igualdad de género: es decir, hacer todo lo que esté a tu alcance para explicar ese punto de vista.
Sin embargo, para hacerlo necesitas también ser una persona crítica: no se trata de luchar por una tendencia, una moda o lo que te dice tu mejor amiga o amigo que está bien. “La crítica en términos de activismo implica pensar en los huecos o puntos débiles de nuestro movimiento.
Identificamos una causa en la que deseamos incidir (equidad de género, por ejemplo) y nos organizamos o nos unimos a una organización para tratar de hacer una diferencia. La crítica en esto es fundamental: entender las razones que han producido la situación que queremos cambiar es lo principal, de lo contrario tendremos soluciones insuficientes o francamente erradas para un problema que no comprendemos del todo”, señalan en Ecoosfera. Y para lograrlo, proponen tres cosas.
INSPIRAR
La manera más efectiva de inspirar a otros es haciendo en tu vida diaria aquello por lo que abogas. Si quieres un cambio relacionado con tu rol social como hombre o como mujer, debes estar dispuest@ a asumir los cambios necesarios en ti, antes que en otras personas. Si vives tu vida de la manera en que desearías que otros la vivieran, será más fácil que ellos se den cuenta por sí mismos de que existen otras opciones.
“A través de la inspiración ocurre el verdadero despertar: todos estuvimos ahí en algún momento, como saliendo de un largo sueño o de una larga mentira, llenos de energía, con una visión nueva… pero sin saber qué hacer”. El arte puede ser una gran herramienta para generar consciencia, para demostrarle a la gente que hay otras formas de existencia más positivas, bondadosas, igualitarias, respetuosas, amorosas.
EDUCARSE
Está bien compartir en tu Facebook y en Twitter comentarios y links sobre tu causa, pero eso no es suficiente. Debes entender en toda su complejidad aquello por lo que luchas. Créeme: es más fácil de lo que crees.
Se trata de investigar, de leer, de preguntar, de escuchar versiones para ir conformando una opinión propia que vaya creciendo con la visión de otras personas, incluso con aquellas que están en contra de lo que tú buscas.
“Conocer posiciones radicalmente contrarias a la nuestra no sólo nutrirá nuestro conocimiento sino que nos permitirá conocer cómo piensan los otros”. Esto te ayudará en tu educación y comprensión de la realidad que quieres vivir, pero también te convertirá en un ser humano paciente y respetuoso, ya que lo ideal —salvo algunos casos— no es ser combativo, sino comprensivo.Si en lugar de enojarte escuchas al otro, tratas de buscar sus puntos buenos y después le hablas de tu postura, lograrás más cosas que luchando sin entender todas las versiones.
CREAR
Las luchas sociales se libran a través del conocimiento y de la acción. Con toda la información que tengas, más las conclusiones a las que hayas llegado, puedes buscar o crear un plan de trabajo, de preferencia con la complicidad de otras personas.
Puedes llevar tus ideas a la plaza principal de tu barrio a través de un performance, montar una exposición pictórica, hacer un cortometraje, escribir un libro, repartir información, compartir tus conocimientos en redes sociales de manera estructurada… las posibilidades son inmensas.
Si quieres entender un poco más sobre el activismo contra la violencia de género que utiliza el arte para hacer un cambio, te invitamos a que conozcas nuestro Proyecto #Querer, el cual se está llevando a cabo en Guatemala y México. ¡Verás que te vas a divertir y harás nuevos amigos mientras promueves una mejor manera de vivir!
¿Cómo es tu visión de la sociedad? ¿Crees que exista el respeto de género? Nos interesa tu opinión te esperamos en el Foro de Hablemos de Sexo y Amor.
