Y tú ¿sabes masturbarte?

By Mara Landa on 26 abril, 201729 agosto, 2022

Aprender a masturbarse es la mejor forma de saber qué te excita y qué estimulación o fantasías son más efectivas para llevarte al clímax.

Masturbarte es una excelente forma para saber cosas nuevas de tu propio cuerpo. Todo se puede mejorar.

Crea un ambiente propicio
El contexto lo es todo. Crea un ambiente agradable y erótico para que tu propio cuerpo se relaje y responda a la estimulación. El ánimo y tener ganas de auto explorarse ayuda en la fase de excitación y a llegar al clímax. Para algunas personas es muy fácil y basta con acostarse, pero otras necesitan más preparación. En cualquier caso, es buen esforzarse en recrea un buen ambiente con velas, olores, aceites para masajes. El autoerotismo es una parte importante y poco valorada de nuestras sexualidad.

La privacidad es fundamental. Hay que asegurarse de que nadie nos va a interrumpir y APAGA EL TELÉFONO.
Conoce qué funciona para ti
Crea tu propia rutina para masturbarte. Aprende qué fantasías o ejercicios funcionan y te llevan al clímax cada vez o más rápido. No olvides puntos importantes como el clítoris o el escroto, que tienen gran sensibilidad y su estimulación puede ser muy efectiva durante el sexo en solitario.

Es importante porque incluso aunque debamos probar cosas nuevas, se debe volver a lo que ya sabemos que funciona para comparar.
Prueba cosas nuevas
Aunque sepamos exactamente qué nos funciona mejor, prueba cosas nuevas y compara. Así tendrás mayor conocimiento sobre tu propio cuerpo y te ayudará cuando realices el acto con otra persona. Por ejemplo:

Se aconseja utilizar juguetes sexuales, pero combinar su uso con sexo en pareja y solos. Los juguetes son muy efectivos para alcanzar el orgasmo, pero también es importante mantener la capacidad de llegar al orgasmo sin ellos, solos o con una pareja.

Usa lubricantes. No solo en pareja, sino también solos para aumentar las sensaciones y ayudar a la lubricación. Aunque no tengamos sexo en pareja la lubricación es igualmente importante y además intensifica las sensaciones.

Cambia de posiciones, de lado, bocabajo. Hay múltiples formas de alcanzar el clímax mediante la masturbación y cada posición de nuestro cuerpo estimula puntos distintos.

Prueba diferentes localizaciones: la ducha, la cama o al aire libre. Cada lugar tiene sus ventajas para realizar el acto en solitarios y, aunque todos tenemos nuestro favorito, no está mal cambiar de vez en cuando. Siempre teniendo en cuenta nuestro contexto y que no vayamos a ser interrumpidos o a molestar a otras personas.
Existen pequeños trucos que hacen una gran diferencia
Cambios en el ritmo o parar directamente – método tántrico que consiste en parar justo antes de llegar al orgasmo. Este ejercicio de excitarse y detenerse se puede repetir varias veces y el clímax final es mucho más intenso.

Ir muy despacio, estimulando cada detalle y poniendo gran parte de la atención en la fase de excitación; que el objetivo no sea llegar al orgasmo. A menudo, las masturbación se usa como una forma rápida de eyacular y liberar tensiones o relajarse. Sin embargo, también es recomendable tomarse el tiempo y prestar mucha atención al cuerpo de vez en cuando.

Los cambios de temperatura pueden ser tremendamente eróticos y estimulan la piel. También se recomienda mantener el ritmo escuchando música. Y, por último, no dudes en buscar estímulos sexuales como la literatura erótica o la pornografía que te ayuden a excitarte y añadan imágenes y fantasías en las que perderte.
Infórmate y aprende sobre tu sexualidad
Enfócate en encontrar y estimular tus partes más sensibles. Los libros e internet son un mar de información de las que sacar ideas que probar. Mantén unos límites de seguridad y ve con cuidado, pero conoce qué le ha funcionado a otras personas y, quizás, también pueda ser placentero para ti .Edúcate en y aprende sobre tus propias zonas sexuales y erógenas – según tu género – para conocer cosas sobre tu cuerpo y gustos.