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Primera parte: Porno vs Porna

By Redacción Hablemos de Sexo y Am on 23 septiembre, 201217 febrero, 2022

¿Y si te pidieran que formaras parte de un tribunal para evaluar porno?

En serio, ¿qué harías? Después de considerar cuidadosamente esta propuesta durante dos largos segundos, dije que sí.

A pesar de que tomé la decisión muy rápido, en realidad accedí a ello por diversos motivos bien razonados. El primero es que no es un tribunal que juzgue el porno convencional. De hecho tengo algunos problemas con el porno convencional.

Como mujer, muchas de las cosas que veo que se le hacen a las mujeres en las películas porno me parecen poco placenteras en el mejor de los casos y degradantes en el peor. Nunca se toman precauciones, los pechos son falsos y la depilación brasileña completa tiene pinta de ser bastante dolorosa.

De la curiosidad a la preocupación

Todo esto hace que me pregunte sobre la seguridad de las condiciones de trabajo y sobre si todo el mundo involucrado en el porno lo hace por su propia voluntad. Esto me lleva a una preocupación que no es nada sexy y por lo tanto el porno puede tener en mi el efecto contrario al esperado.

El jurado en el que me invitaron a participar revisa el porno femenino, también conocido como ¨porna¨. Tengo curiosidad por ver si el porno femenino desarrolla los aspectos que me desmotivan. También quiero ver si la porna hace lo que se supone que debe hacer, es decir, excitarme a mí y a otras mujeres.

Mi deber cívico

Este tribunal está patrocinado por Dusk TV, que afirma ser el primer canal de televisión erótica solo para mujeres. Su intención es que las mujeres les ayuden a pulir su concepto de porna. Creo firmemente en que las cosas se deben cambiar desde dentro, así que me estoy tomando esto como un deber cívico.