Hombre robot
Pixabay

Robots para ejercitar el sentido del tacto

¿Qué pasa si tocas las partes privadas de un robot? Este estudio de EE UU lo investigó con 10 estudiantes muy dispuestos. ¿Se habrán calentado?

Con el tacto construimos intimidad y confianza. Los investigadores lo ven como una especie de ‘pegamento’ social que ayuda a la gente a desarrollar relaciones y a mantenerlas fuertes.

Así que no sorprende que tocar a alguien pueda ser muy significativo… e íntimo. Si lo piensas, el mismo tacto puede causar enojo o repulsión cuando no es deseado, y placentero cuando viene de un/a amigo/a o amante.

Respuestas Físicas

Ser tocado también puede traer respuestas físicas como un ritmo cardíaco más bajo y mayor conductividad de la piel. Por eso la mayoría tenemos cuidado sobre cuáles partes del cuerpo dejamos que nos toquen, y sabemos cuáles pasan el límite en los cuerpos de otras personas.

Desde luego que hablamos de tacto entre personas. ¿Y algo de esto aplica cuando una persona toca otra cosa, digamos, un robot? Si crees que suena muy loco, lee: un equipo de investigación en robótica quizá no piense lo mismo. Por investigaciones pasadas ellos creen que tocar a un robot podría provocar una respuesta física muy real en humanos. Así que se preguntaron si las mismas reglas relativas al tacto entre personas, aplicarían también en el tacto entre una persona y un robot.

¿Erótico?

El equipo consiguió diez estudiantes dispuestos tocar las partes íntimas de un robot en nombre de la ciencia. El robot en cuestión (un NAO) no era como una muñeca inflable. Claro, tenía forma humana. Pero era más un juguete de plástico de solo 58 cm. de alto. ¡No lo confundirías con una persona! El robot fue programado para instruir a los estudiantes a tocar o señalar 13 partes de su cuerpo, desde las manos, hasta los genitales del robot.

Mientras los estudiantes seguían las instrucciones con una mano, se les colocó un sensor en la otra. Éste grababa la conductividad de la piel, una medida de excitación psicológica, y también la velocidad con que llegaban a tocar cada parte del cuerpo. Qué pasaría cuando se les pidiera tocar las partes privadas del robot, eso quería saber el equipo. Seguro que tocar los pedazos de un juguete de plástico en un laboratorio no puede ser nada erótico, ¿o sí?

¿Se siente real?

Sin embargo, los sensores de piel revelaron la verdad. Cuando el robot invitó a los participantes a tocar su trasero o sus genitales, la conductividad de su piel aumentó.

En otras palabras, se excitaron.

Es más, les daba vergüenza – dudaron antes de cumplir las sugerencias traviesas del robot. Cuando tocaban partes como manos y pies, los sensores no mostraban ninguna reacción. ¿Y por qué toquetear las ‘partes privadas’ de un juguete de plástico puede excitar? Aunque el robot usado en el experimento claramente no era humano, tiene las mismas partes físicas que un humano, y se mueve como humano. Así que instintivamente no puedes dejar de sentir que está vivo. Y cuando tocas su cuerpo, la sensación física en tu propio cuerpo puede aumentar esta percepción.

Avatar Romántico

Esto puede llevar a una persona a excitarse al tocar en un robot, partes que en un humano son privadas, y sentir que no es correcto hacerlo – al menos no si el robot es un extraño. Ahora, si el robot fuera un avatar que representa una pareja romántica – y sí, este tipo de cosas pasan en el ambiente de los robots – tal vez podría tenerte ¡hirviendo en deseo!

Fuente: Tocando un cuerpo mecánico: Contacto táctil con las partes íntimas de un robot de forma humana es sicológicamente excitante. Li et al. 2016.

¿Tendrías sexo con un robot? ¡Háblanos del tema en Facebook!

Traducción: Octavio Eguiluz

¿Aprendiste algo nuevo?

Tell us what you think

HABLEMOS DE SEXO Y AMOR

Información libre, clara y sin rodeos sobre amor, sexo y relaciones