Técnicas raras para superar una ruptura
Sin duda, cada uno tiene sus rituales al momento de terminar una relación amorosa.
El proceso de aceptación de la pérdida tiene formas infinitas y, a veces, muy originales…
Trabajar en un bar es, irremediablemente, llenarse de historias ajenas. De entre todas, recuerdo ahora una con claridad: en octubre del año pasado, el bar donde trabajaba, un local pequeño con un solo empleado (yo), se estaba llenando y no había suficientes sillas. En una mesa estaban sentadas dos mujeres y tenían, en un tercer asiento, a un esqueleto plástico tamaño real con una corbata.
Le pregunté a la mujer si podía prestarme la tercera silla (siempre tratamos de ser comprensivos con los clientes) y me contestó que prefería que no, pues era una noche importante para ella.
-Entiendo. Cuénteme, por favor, ¿qué están celebrando?
-Es mi bienvenida de soltera.
En ese momento la idea me pareció genial y todavía pienso igual. Hay maneras muy diversas de terminar relaciones, hay algunas buenas en que cada quien toma por su lado y hasta podrían tomarse un café en unos años (‘donde hubo fuego, cenizas quedan’, dijo una tía). Hay otras que terminan casi a bofetazos, porque sus vidas dejaron de tener sentido juntas. Y las hay que cierran con guerra, casi siempre cuando a alguien le pusieron los cuernos.
Ese concepto de bienvenida de soltero es muy parecido a la respuesta estándar que tenemos los hombres después de terminar una relación. Ahora con grupos en Whatsapp y Facebook resulta muy sencillo: ‘Colegas, hoy terminé con mi novia, aquella, la morena. ¿Quién se suma a las frías?’ y terminamos todos en una cantina bebiendo las penas ajenas.
Así como no hay una manera de terminar una relación, tampoco hay un único modo de superar los días posteriores al ‘hasta aquí’. En algún momento, con esos noviazgos colegiales, una ruptura me coincidió bastante convenientemente con un examen de matemática muy fuerte. Me sumergí en libros y salí unas semanas después, envenenado de ecuaciones, pero con un 9 en la prueba y la mente despejada.
Una amiga que recientemente terminó con su novio se dedicó a rumbear la noche.
De un pronto a otro, se volvió la compañera de fiesta más entusiasta que uno pudo haber esperado. Otro amigo siguió el consejo que Mercurio le da a Romeo: ‘un clavo saca a otro’. No hay un modo infalible ni una única sugerencia.
Me parece que un par de lecciones, eso sí, se pueden sacar en claro:
- Si terminaron porque te engañó tu pareja, no fue culpa tuya. Fue de él o ella. Si vuelven después de eso, que no te sorprenda si pasa de nuevo.
- Partidos interminables de béisbol, cubetas enteras de helados, libros, películas de Helen Hunt (aunque mejor no); casi todo se vale en esos primeros momentos de post-ruptura. Lo importante es dejarlo atrás.
- En caso que tú hayas terminado la relación, escribe en un papel las razones mientras todavía las tienes claras. Los primeros meses, si no los manejas bien, pueden ser confusos y los recuerdos se oscurecen y traicionan. ‘Papelitos hablan’, decía un expresidente tico.
No hay método malo ni sistema a prueba de tontos. Cada quien encontrará cómo solucionar esos meses. La experiencia de media humanidad comprueba que cualquiera puede sobrevivir a una ruptura, el mundo sigue y hay otros peces en el mar. En el caso de mi clienta del bar, ella encontró que salir a tomar con el ‘esqueleto de su ex’ y una amiga era una buena manera de seguir adelante. A mí me pareció divertido. Un poco macabro, sí, pero divertido.
Le permití tener la silla ocupada hasta muy entrada la noche, cuando no me quedó otra opción más que pedirle el espacio para que un cuerpo con pulso ocupara el campo. Ella no se molestó: su compañero debió moverse sobre unos toneles viejos, pero su vaso nunca estuvo vacío el resto de la noche.
Déjanos tus mejores técnicas para superar rupturas, te leemos en el foro de Hablemos de Sexo y Amor.
Recuerda que te compartimos diferentes puntos de vista, que no necesariamente representan nuestra postura, la decisión final la tomas tú.