Control de la natalidad: planifica bien y evita riesgos

By Sarah Moses on 8 julio, 201217 febrero, 2022

Los DIU y los implantes son una opción más segura que la píldora anticonceptiva para evitar embarazos no planeados. Y esto aplica especialmente a mujeres jóvenes.

El problema con la píldora y otros tipos de control de la natalidad de corto efecto es que deben ser empleados adecuadamente porque se corre el riesgo de quedar embarazada sin desearlo.

Las mujeres que usan la píldora, el parche anticonceptivo o el anillo vaginal tienen 20 veces más riesgo de quedar embarazadas accidentalmente, en comparación con las mujeres que llevan un DIU o implantes anticonceptivos, reveló un estudio realizado con casi 7,500 mujeres en Estados Unidos.

Largo plazo: más seguro

Las participantes recibieron información sobre los diferentes métodos de control de natalidad y una prescripción gratuita para el tipo que ellas eligieran usar. Podían optar entre métodos de corto plazo, como la píldora, el parche anticonceptivo, el anillo vaginal o la inyección anticonceptiva; y métodos de efecto a largo plazo incluyendo el DIU y el implante anticonceptivo.

Después de tres años, 334 de las mujeres quedaron embarazadas, en 156 casos se debió a un fallo en el método anticonceptivo elegido.

No todos los anticonceptivos tenían el mismo efecto. Los DIU, reversibles y de efecto prolongado, así como los implantes y la inyección anticonceptiva eran los métodos más efectivos, demostró el estudio.

Métodos de efecto a corto plazo

La píldora: ingerir una al día durante tres semanas y hacer una semana de pausa. Contiene dos hormonas, estrógeno y progestina. La “mini-píldora” sólo contiene progestina, y hay que tomarla cada día a la misma hora.

El parche: un parque pequeño que se adhiere a la piel inyectando pequeñas dosis de estrógeno y progestina a través de la piel. Es necesario cambiarlo una vez por semana durante tres semanas, y hacer una pausa de una semana.

El anillo: un anillo de plástico que tú misma introduces en la vagina donde emite una dosis continua de estrógeno y progestina. Lo dejas puesto durante tres semanas por vez, y después de una semana de pausa, introduces uno nuevo.

Largo plazo

Inyección anticonceptiva: Hay dos tipos, uno que emplea dos hormonas, que se aplica una vez al mes, y el otro que emplea una hormona y se aplica cada tres meses.

Métodos reversibles de largo plazo

DIU (Dispositivo Intrauterino): Es colocado en el útero por un médico y lo puedes dejar por un máximo de cinco años. Existen dos tipos: uno hormonal, que suelta progestina, y uno de cobre que previene la fecundación del óvulo. Es la opción anticonceptiva más popular del mundo, sobre todo por su amplio uso en China.

Implante: una pequeña varilla que se inyecta en el brazo, bajo la piel, y suelta una dosis continua de progestina. Puede permanecer entre tres y cinco años.

Joven y olvidadiza

El problema con la píldora, el parche y el anillo vaginal es que, si no lo empleas de la manera adecuada, pueden fallar.

No hay que olvidarse de tomar la píldora o cambiar el parche o el anillo en el día que se necesita.

Pero con un DIU o implante, una vez que el médico lo ha colocado adecuadamente, ya no hay mucho que pueda fallar. Simplemente continuarán brindando protección contra embarazos no deseados y ya no tienes que pensar en otros métodos.

Las mujeres más jóvenes que usan la píldora, parche o anillo tenían una probabilidad doble de quedar embarazadas accidentalmente en comparación con las mujeres mayores de 21 años.

Probablemente, cuanto mayor y más sensata eres, mayor probabilidad tendrás de no olvidar la píldora en el momento adecuado. La edad no representaba ninguna diferencia en el caso de las mujeres que emplean DIU, implantes o inyecciones.

Inquietud

Un sorprendente 50 por ciento de todos los embarazos en Estados Unidos son embarazos no deseados, según demostró el estudio. Además, la mitad de las mujeres con estos embarazos cree que está actuando con sensatez, empleando anticonceptivos. El problema es que no toman la píldora a tiempo o simplemente se olvidan.

Los métodos de efecto a largo plazo, como DIU e implantes, podrían ser la solución para reducir el número de embarazos no planificados, señalan los estudiosos. Una visita al médico y ya no tendrás que preocuparte por el temor a quedar embarazada, hasta el momento en que sientas la necesidad de tener un bebé. Y nunca te despertarás con la inquietud de que quizá te hayas olvidado de hacer algo importante.