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¿Cómo perderle el miedo al examen de senos?

By Michela Guarente on 14 octubre, 201517 febrero, 2022

A poco de la celebración del Día contra el Cáncer de Mama, una usuaria de Hablemos de Sexo y Amor le manifiesta sus temores a nuestra consultora Michela Guarente.

Pregunta: Mi nombre es Graciela, tengo 26 años y en mi familia ha habido 2 casos de cáncer de mamas de mis tías de lado paterno. ¿Estoy igual en riesgo de contraer cáncer de mamas? En todo caso, ¿a partir de qué edad debo hacerme chequeos?  ¿Y qué tipo de exámenes existen? ya que me han dicho que con las mamografías te aplastan los senos con un aparato y, la verdad, me asusta un poco la idea de someterme a ello. ¿Qué me aconsejan?

Respuesta: Hola Graciela, gracias por escribirnos. Felicitamos tu interés por querer cuidar tu cuerpo. El momento para comenzar a prevenir es ahora, estás actuando a tiempo.

Trata una vez al mes -más o menos en la misma fecha- de realizar una auto exploración mamaria (Evita hacerlo los días que tienes la menstruación, pues las mamas tienen una sensibilidad diferente en esta época). La idea de este autoexamen es detectar si tienes protuberancias, secreciones o algo nuevo en tus senos. 

Puedes hacerlo mientras te bañas y pasar la mano enjabonada en la zona. Si te vas a explorar la mama izquierda, usa tu mano derecha y luego pasa a la mama derecha explorando con tu mano izquierda. Dibuja imaginariamente una cruz en cada seno y con tus dedos, toca de arriba a abajo y de derecha a izquierda cada seno y luego de forma circular.

Posteriormente, toca cada axila. Otro momento para hacerlo es acostada en la cama y realizas el mismo procedimiento. Tus manos son las herramientas perfectas para prevenir.

Mírate desnuda al espejo y observa tu cuerpo. Si encuentras una mama que está más abajo que otra y no es usual, o una mama significativamente más grande que otra, si notas secreción, cambios en la piel alrededor del pezón, hundimiento o palpas algún nódulo mayor a 1cm, ve a tu médico sin pensarlo.

Puedes ir a tu consulta ginecológica y hacer un chequeo de base. Entendemos tu susto por tus antecedentes familiares, pero NO tiene que ocurrirte a ti también, sobre todo porque estás haciendo lo posible a tiempo. Tu doctor o doctora también puede enseñarte a explorar tus senos. (Además que, examinarte esta zona, forma parte de la rutina de la consulta). En dicha consulta revelarás todos tus hábitos según el interrogatorio del o la especialista y, en caso de ser necesario, te pedirá algún estudio extra.

Existe también la ecografía mamaria, que es un estudio complementario que ayuda a detectar anomalías.

Con respecto a información que manejas sobre la mamografía, ciertamente es un estudio incómodo pero necesario para mujeres mayores de 35 años si tienen antecedentes familiares, como es tu caso.

Pensamos que estás tomando decisiones importantes para tu salud a tiempo: explórate y acude a tu consulta médica. En caso de ser necesario, tu especialista te dirá si debes hacer algún examen adicional. ¡Cero miedo, Graciela! Estamos pendientes de ti por esta vía.

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