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Conoce los anticonceptivos masculinos del futuro

En un futuro, los hombres tendrán más posibilidades anticonceptivas además del preservativo y la vasectomía. Aquí algunos métodos en proceso de investigación…

Fuente | Verónica Maza Bustamante (La doctora Verótika) periodista, educadora sexual, escritora, conferencista, promotora de los DDHH, melómana, exploradora de temas tabú.

  1. La inyección anticonceptiva para hombres

    La inyección anticonceptiva para hombres que mezcla testosterona con progestina tenía pronósticos estupendos al inhibir la producción de espermatozoides.

    En siete países se llevó a cabo un estudio en donde se confirmó que su eficacia era mejor incluso que la de la píldora anticonceptiva para las mujeres, pero resultó que generaba depresión en sus consumidores (además de presentarse algunos casos de eyaculación inhibida), por lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió suspender el protocolo de investigación encaminado en aprobar su venta.

    Sin embargo, los hombres jóvenes quieren controlar su propia fertilidad y no seguir dependiendo de su pareja o del preservativo en casos de relaciones monógamas. 

    En el estudio realizado por la OMS se reveló que esta inyección tuvo tasas de aceptación de más de 70%, y un 84% de los participantes aseguró que usaría la inyección masculina como método anticonceptivo, por lo que se sigue insistiendo en su permiso de venta.

  2. El bloqueo del flujo de semen

    Según la Norma Nacional Sobre Regulación de la Fertilidad en Chile, existe una nueva tecnología de anticoncepción masculina que está actualmente en fase de estudio para su uso masivo: el bloqueo del flujo de semen, que está siendo investigado en India.

     Consiste en inyectar 60 miligramos de anhídrido estireno málico en los conductos deferentes, lo que habría demostrado proporcionar anticoncepción efectiva por varios años.

  3. El gel que suprime la creación de espermatozoides

    Un grupo de investigadores desarrolló un nuevo gel que introduce en el torrente sanguíneo una combinación de las hormonas progestina, la cual suprime la creación de espermatozoides.

     Se aplica una vez al día para incorporar testosterona de forma constante a través de la piel, en niveles lo suficientemente bajos para evitar la producción de esperma en los testículos, pero lo suficientemente altos como para prevenir efectos secundarios problemáticos.

    El gel resultó eficaz cuando se probó en un ensayo piloto: aproximadamente 89% de los usuarios redujo cuando menos a un millón por mililitro su cantidad de espermatozoides, lo cual es típicamente considerado como un punto que indica una supresión de esperma exitosa.

    Ahora, el Instituto Nacional de Salud y el Consejo de Población de Estados Unidos están preparados para llevar a cabo un ensayo clínico para esta prometedora forma de control de la natalidad masculina.

  4. Inhibición Reversible de Esperma Bajo Guía

    Sajoy K. Guha es un bioingeniero médico de la India que lleva cuatro décadas intentando sacar adelante el proyecto de su vida, conocido como RISUG (Inhibición Reversible de Esperma Bajo Guía), el cual se encuentra en la fase 3 de análisis clínico (el último antes de su comercialización).

    Se trata de la producción de un anticonceptivo masculino no hormonal, reversible, efectivo, duradero y barato.

    Consiste en inyectar en el conducto deferente (el canal por el que pasa el esperma en el escroto) una pequeña cantidad de gel compuesto por un polímero con carga eléctrica positiva, que daña las cabezas y las colas de los espermatozoides, de carga eléctrica negativa, provocando así su infertilidad.

    Si se desea volver al estado inicial, otra inyección disuelve la sustancia y se recupera la fertilidad. El método se aplica en 15 minutos con anestesia local, parece no tener efectos secundarios, una efectividad de 98% y la dosis dura más de diez años. El principal problema al que se enfrenta Guha son las grandes farmacéuticas y las empresas que fabrican preservativos, pues su negocio se vería afectado con un sistema anticonceptivo semejante.

  5. La modificación del gen que produce espermatozoides

    Otro gel que se encuentra en investigación funciona así: el cuerpo humano contiene “genes saltarines” llamados transposones, que pueden pasar de un gen a otro.

    Cuando saltan a genes sanos, pueden afectar su estructura, causando mutaciones que pueden conducir a grandes problemas. El gen PNLDC1 es vital en la producción de esperma. Por lo tanto, si funciona correctamente, evitará los transposones que pueden dañar la producción de espermatozoides.

    Pero, si no se tiene ese gen, se perderá la capacidad de luchar contra los invasores de genes y eso puede hacer que disminuya la cantidad de espermas en el semen.

    Aunque el procedimiento solo se ha probado en ratones, los roedores utilizan muchos de los mismos genes implicados en la reproducción que los hombres, por lo que están considerando si modificar este gen puede ser una opción viable y comercial de anticoncepción masculina.

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